25 de diciembre de 2010

Una particular travesia...

Martes 14 de Diciembre, Santiago de Cali, Terminal de transportes, oficina de Bolivariano:

-Hola, me das dos tiquetes para Pasto el Viernes por favor.
-Claro, cuestan 42.
-Bien, gracias, que estés bien.

Salimos, mi hermano, Charanga y yo, por aquel claustrofobico túnel, hacia el roundpoint, que conecta la avenida tercera norte con la avenida de las americas, para así poder entrar facilmente al Sistema MIO, la opción mas clara era subirnos en la estación versalles, ya que era la mas cercana a aquel insoportable terminal...

Una vez allí, aquellos dos personajes con los que iba, recordaron haber visto un tubo muy interesante sobre el cual se podrían deslizar sobre sus tablas, y decidimos caminar unas cuantas cuadras mas, hasta la estación de la americas, en donde entramos por fin al sistema... Pero bien, el plan original de aquel día después de haber comprado los tiquetes para el viaje hacia Pasto, era pasar por Empire, pero la lluvia no nos dejo, y simplemente decidimos seguir hacia el sur...

Una vez en casa todo siguió normal, pasaron días normales, cumplí con los deberes que tenia en mi universidad, e incluso tuvimos tiempo de ir a divertirnos motorizadamente a cosmocentro aquel Jueves...

Pero bien, esa noche, todo empezó a tornarse sospechosa mente complicado, una llamada de aquel señor con quien viví algunos meses de primer semestre, diciendome "que has sabido del derrumbe, para ver si viajamos juntos?" Me dejo frió, primero, ya no iba a viajar en Bolivariano, y segundo, había un derrumbe en la vía!! Que pensaban mis papas al dejarnos sin ese pequeño detalle informativo? Pero en fin, supusimos que seria bueno viajar en un carro particular, ya que seria mas fácil pasar el derrumbe...

Empieza la travesía, debería ir al terminal de nuevo a dejar abiertos los pasajes, volver y empezar la odisea de lograr organizar maleta, y casa para viajar al día siguiente con estos amigos.

Despidiendome aquel Viernes de la comunidad Palmireña de UniValle, tuve la oportunidad de manejar por unos momentos uno de los mas espectaculares carros del momento, un Hyundai Coupe.

Pero bien, eran las diez de la mañana de aquel sábado y llegaron por mi hermano y por mi como estaba acordado, el viaje empezó normal, emprendimos camino hacia el su, hicimos una parada para almorzar, y continuamos, todo empezó a tornarse sospechoso cuando a la salida de la ciudad de Popayan, una gran cantidad de buses de servicio publico detenidos, avisaban lo que se nos venia unos kilómetros adelante.... Y así fue, en el municipio de Timbio Cauca, con un particular y extraño trancon, después de dar ciertas vueltas por aquel pueblo, decidimos simplemente volver hacia Cali...

Decepcionado, molesto, BRAVO, histérico, decidí buscar a mis dos mejores amigos, e inmediatamente buscar la manera mas rápida de viajar hacia Pasto, no estaba dispuesto a esperar tanto tiempo, así que si, en la pagina de avianca, vi un vuelo, con un particular itinerario, pero que se mostraba como una opción no muy descabellada, aquel vuelo Cali-Bogota-Pasto, estaba programado para el 21 de Diciembre, el precio fue alto, pero accesible, así que quedo decidido, se compraron aquellos dos pasajes, en dos hermosos aviones, y estábamos "contentos", después de todo, en el cielo no hay derrumbes... Así que buscamos la forma de entretenernos hasta que sea hora de emprender viaje, y así fue, no desarmamos maletas, cocinamos lo justo, comimos lo justo, dormimos mas de lo justo, pero bueno, no nos dejamos ganar (mucho) por el aburrimiento... Hasta que por fin...


Martes 21 de Diciembre, Cali, barrio La Playa, bajo un prometedor sol Caleño, con un morral del peso de mi hermano, una maleta rígida con una tabla pegada, y un requinto amenizando la espera, nos encontrábamos, José, mi hermano y yo, esperando a que un muy particular y buena gente personaje, llegase por nosotros, con un ligero retraso, estuvo allí, y aplicando sus buenos conocimientos en el arte de la conducción, nos dejo en el Aeropuerto Internacional Alfonso Bonilla Aragon, en un tiempo record, tiempo que al parecer no sirvió mucho, ya que, la fila para hacer, aquel tortuoso check in, fue bastante larga, tanto, como para encontrarnos con una persona "prospecto de integrante" de nuestra familia (por favor querido tío, pedimos a gritos eso que nuestra bisabuelita te pide!! :D), y solucionar el problema de comunicacion por el que ella atravesaba, pero bien, hecho nuestro check in, corrimos hacia la sala de embarque, y sin embargo, nuestro vuelo el ya famoso 9210, se encontraba retrazado, así que decidimos nada mas esperar.
Animados por la imagen de una Airbus A320-200 aterrizando en aquella pista, y por el aviso de "señores pasajeros del vuelo Avianca 9210, con destino a la ciudad de Bogota, les informamos que el avión que cubrirá nuestra ruta ya se encuentra en la puerta, y podremos abordar en cuanto este se encuentre en condiciones óptimas de aseo y tanqueo", tomamos nuestras cosas y estuvimos alerta, hasta que el anuncio de que nuestro vuelo se había cancelado por "fallas técnicas en el avión", destrozo todas nuestras esperanzas... Mas tarde nos enteramos que el avión con fallas técnicas había sido un MD-83 y no el bello y nuevo A320, con destino a Miami, por lo que habían asignado nuestra aeronave a esa ruta, tiempo después solucionaron todo los problemas y "descancelaron" nuestro vuelo, momento en el que el abordaje, empezó a hacerse, no sin antes CONFIRMAR (y espero que algún directivo de avianca lea esto!), que no perderíamos nuestra conexión hacia Pasto, así que calmados subimos a ese avión y emprendimos vuelo hacia Bogota, un vuelo algo movido, pero muy entretenido, gracias en parte al sistema multimedia con el que cuenta dicha aeronave.


Nuestro avión aterriza a las 2:40 en la pista de el aeropuerto El dorado en Bogota, y nuestra conexión con Pasto, salia a las 2:53, una vez allí confirme que en Bogota, hay trancones hasta de aviones!

Y bien, baje de aquel avión, y urgente corrí a buscar el modulo de conexiones, para que de una brusca y grosera manera me respondiesen "El avión ya salio", y aquí, aquí queridos lectores empieza una de las mas absurdas y extrañas aventuras en mi vida! (La mas extraña algunos ya la conocen y la contare en uno o dos años por este mismo medio), remitido a la oficina de reservas, de nuevo con una grosera manera, la única respuesta que obtengo es "No, no hay cupos hasta el 28 de Diciembre" siempre fiel a mi principio de ser educado, pido una solución funcional y me remiten al área de servicio al cliente, atravesando de un lado a otro el terminal puente aéreo (una vez mas), y agradezco formalmente, aunque por dentro estoy gritando "hijos de putas!!! como no son ustedes los que están en una ciudad ajena, y no van a pasar 24 con sus familias por SU culpa!!!" Una vez allí, me encuentro haciendo fila (de nuevo!!!), junto a muchas personas mas, pero noto algo que en un principio no me agrado, pero que luego serviría bastante, delante mio, un conocido acento sureño, detrás mio, de nuevo ese acento acompañado por el hablar perfecto de un Ingles Americano, en un principio me dije "carajo, mas gente para Pasto, no habrá cupos", pero luego de entablar una fácil conversación con ellos me dije "Excelente (con tono de Señor Burns), en combo los Pastusos berracos que somos, vamos a lograr algo..." Y así fue, una vez el primero de la comunidad Pastusa (o que tenían que ir hacia Pasto), llego a la ventanilla, me entregaron la vocería de aquel gran grupo, y llamando a una supervisora, después de uno que otro estallido de furia e impotencia, lograron darnos solución.

Y bien allí conocí grandes personas, con grandes historias, desde Thomas, un ciudadano estadounidense, quien su esposa era Pastusa, bastante carismático de por si, hasta una líder política que nos puso a reunir firmas para enviar una carta a Avianca, pasando por una Pereirana (buena representante de la fama de las paisas, muy bonita), que debía ir a trabajar a Pasto, y Norm, otro ciudadano estadounidense, pero esta vez de Alaska, quien vivía en Pasto desde hace mucho....


Y bien, así fue, nos dieron un vuelo para las 11:55 del siguiente día, y todos los que nos habíamos conocido allí, simplemente partimos hacia algún lugar en donde pasar la noche en Bogota, mi hermano (quien ya había sido vencido por la impotencia), y yo, pasamos la noche en el apartamento de una muy buena amiga de mis padres, a quien agradezco de nuevo su hospitalidad, dándole incluso a mi hermano, la posibilidad de comprar su regalo de navidad en aquella ciudad...

Bien, las 9:30 am, terminal puente aéreo en Bogota, la congestión mas grande en el año, afortunadamente, ya teníamos nuestros pasa-bordos, y pasando de nuevo por aquel tramite, pudimos acceder a la sala numero 6, viendo que muchos de los que habíamos conocido el día anterior, ya se encontraban allí.

En el momento en que llegamos, la actividad en esa terminal era imparable, las diez salidas de las que dispone estaban absolutamente llenas, y había aviones haciendo fila para desembarcar pasajeros y embarcarlos de nuevo, pero afortunadamente, en el momento en el que anuncian que el vuelo de 11:55 hacia Pasto, sale sin retrasos y nuestro avión ya se encontraba en la puerta numero nueve, ese terminal, estaba absolutamente vacío....

Y así fue, tratando de amenizar esos últimos momentos de espera, entablo cierta conversación con Thomas y Norm, los dos ciudadanos de Estados Unidos, quienes me dicen que se encontraban desesperados por llegar a Pasto, al igual que nosotros, de hecho, Thomas, con su particular, carisma, promete besar el piso apenas se pueda bajar de el avión... Mas tarde veremos que cumplió su promesa, la comunidad Pastusa era odiada en ese momento por el personal de Avianca, (así como Vivian Martínez, del Staff de avianca, es odiada oficialmente por todos los pastusos), el escandalo que hacíamos era impresionante, y querían sacarnos de allí inmediatamente, y así lo hicieron... Inmediatamente abrieron la puerta de embarque, todos corrimos hacia aquel avión, algunos en contra de el movimiento de aquella rampa de subida(mi hermano, Thomas y yo, ya la sonrisa en nuestros rostros era evidente), y por fin, estábamos allí, abordo de un Fokker 100, que carreteando mas lentamente que nunca en El Dorado, fue aplaudido en su despegue, un relajo total durante el vuelo, y una euforia impresionante durante el aterrizaje... Aquí Thomas cumplió su promesa, todos nos abrazamos y nos dijimos lo agradable que fue conocernos y contar con el apoyo de todos para por fin, llegar a Pasto...


Mas... NO fue total la euforia cuando nos dimos cuenta que muchos de los que tanto habíamos recochado, seguíamos esperando en aquella pequeña sala por nuestras maletas, los minutos pasaban, y pasaban y aun no había señal de ellas... Después de llenar un formulario, llegaron por fin, un día después, pero llegaron...

Y así, por fin después de un viaje de 27 horas, que se supone debería haber durado 4, nos encontrábamos en Pasto disfrutando del "calor" (que no era para nada caliente) familiar y navideño, hoy, agradezco a todos los que nos apoyaron en esa extraña travesía:....

Nathalia Rojas, Cristian Naspiran, Sonia Velazco, Hector Benavides, pero en especial, muchísimas gracias a vos, padre, Esteban Martínez. Y a todos aquellos pertenecientes, bien sea por nacimiento o adopción (como dijo Thomas "I'm Pastussian!"), a la BERRACA COMUNIDAD PASTUSA, VIVA PASTO CARAJOOOO!!!

1 comentario:

Comenteeen, jajaja, Se sabe que piensan de este vago!